La presidencia de la Segunda República Española fue ocupada por el republicano conservador Niceto Alcalá-Zamora desde 1931 hasta 1933. Después de su renuncia, su sustituto fue el republicano de izquierdas Manuel Azaña. Azaña fue elegido en 1933, tras la aprobación de la Ley de Sucesión Presidencial por el Parlamento.
Azaña fue el primer presidente de la Segunda República Española tras su inauguración en 1931, y lideró el gobierno durante el periodo de transición hasta las elecciones. Después de las elecciones de 1933, Azaña fue elegido presidente de forma unánime y mantuvo el cargo hasta 1936. Durante ese periodo, intentó impulsar una política de izquierdas y promover la reforma agraria, la reforma de la educación y la reforma de la administración.
Azaña dimitió como presidente en 1936, tras el triunfo de las fuerzas de derechas en las elecciones generales. Su sucesor fue el republicano conservador Miguel Maura, quien fue elegido de forma unánime por el Parlamento. Maura fue presidente hasta la proclamación de la Guerra Civil Española en 1936.
En conclusión, Manuel Azaña fue el sucesor de Niceto Alcalá-Zamora como presidente de la Segunda República Española. Azaña fue elegido presidente por el Parlamento en 1933 y mantuvo el cargo hasta 1936 cuando dimitió tras el triunfo de las fuerzas de derechas. Después de su renuncia, su sucesor fue Miguel Maura, quien fue presidente hasta la proclamación de la Guerra Civil Española.