El Rey Niño fue un monarca infantil que gobernó en España durante el siglo XV. Se llamaba Juan de Austria y fue hijo de los reyes Fernando e Isabel de Castilla. Su nombre oficial era Juan de Borbón y de Austria, aunque se le conoció como el Rey Niño.
Fue nombrado Rey en 1474, a la edad de seis años. A pesar de su edad, se le dio el título y los derechos de un monarca real, y se le permitió gobernar con un consejo de regencia compuesto por los nobles más poderosos de la época. Durante los 14 años que duró su reinado, el Rey Niño se destacó por su inteligencia, su carisma y su determinación para mantener el orden y la estabilidad en el reino.
Durante su mandato, el Rey Niño llevó a cabo numerosas reformas, especialmente en el área de la justicia. Estableció un sistema de cortes con el objetivo de mejorar la administración de la justicia y proteger los derechos de los ciudadanos. También luchó contra la corrupción y los abusos de poder a través de la justicia.
Además de sus logros en la política, el Rey Niño también fue famoso por su facilidad para la poesía, la música y la literatura. Escribió numerosas obras y contribuyó a la cultura española de la época. Murió a la edad de 20 años, dejando un legado de reformas políticas, sociales y culturales que todavía se ven reflejadas en España hoy en día.