El rey español que murió en 1700 fue Carlos II. Carlos II fue el último monarca de la línea Habsburgo en el trono de España. Nació el 6 de noviembre de 1661, era hijo de Felipe IV de España. Carlos II fue un rey muy diferente a sus predecesores, pues era muy débil y enfermizo y no se interesaba mucho por el gobierno. Debido a esto, el gobierno de España fue controlado por sus primos y ministros.
Durante su reinado, Carlos II luchó para mantener el equilibrio político en la Península Ibérica. Aunque no tuvo éxito, sus esfuerzos ayudaron a evitar que fuera invadida por Francia. Carlos II también tuvo que lidiar con los resultados de la Guerra de Sucesión Española, un conflicto internacional que duró cerca de una década.
Carlos II murió el 1 de noviembre de 1700 sin un heredero. Su muerte marcó el fin de la dinastía de los Habsburgo en España y abrió la puerta a la Guerra de Sucesión Española. La muerte de Carlos II también dio lugar a una serie de conflictos en la Península Ibérica que duraron décadas.
En el año 1700 murió Carlos II de España, quien fue el último rey de la dinastía de los Austrias. Carlos II nació en 1661 y fue el hijo de Felipe IV, rey de España, y de Mariana de Austria. Durante su reinado, España estaba en una crisis económica y social causada por la guerra de los Nueve Años. Además, Carlos no tuvo hijos, por lo que se habló mucho sobre la sucesión al trono. Finalmente, el rey no pudo encontrar una solución a la crisis de la dinastía y falleció en 1700, dejando el trono vacío y sin heredero.
Después de la muerte de Carlos II, se inició la Guerra de Sucesión Española entre los partidarios de Felipe de Anjou, el heredero de Carlos II, y el Archiduque Carlos de Habsburgo. Esta guerra duró 12 años y acabó con el Tratado de Utrecht, donde se estableció que Felipe de Anjou se convertiría en el nuevo rey de España. De esta forma, comenzó la Dinastía de los Borbones, la cual gobernó hasta el siglo XIX.
En conclusión, en 1700 murió Carlos II de España, el último rey de la Dinastía de los Austrias. Esta muerte provocó una crisis de sucesión que duró 12 años, conocida como la Guerra de Sucesión Española. Al final, se estableció que Felipe de Anjou se convertiría en el nuevo rey de España, y comenzó la Dinastía de los Borbones.
En 1700, el último rey de España fue Carlos II de Borbón. Él fue el último de los Reyes Católicos. Carlos II nació el 6 de noviembre de 1661 en Valladolid. Fue bautizado como Carlos Antonio de Borbón. Su padre fue Felipe IV de España. Carlos II fue un monarca débil y enfermizo, lo que provocó que su reinado fuera marcado por los problemas internos y externos. Al no tener un hijo, murió sin heredero el 1 de noviembre de 1700, a la edad de 38 años. Esto puso fin al Reinado de los Austrias en España.
Después de la muerte de Carlos II, se inició el Periodo de Sucesión. Esto fue un conflicto entre Francia y Austria, que se disputaban el trono español. Para decidir quién iba a ser el nuevo rey español, se formó la Guerra de Sucesión Española. Finalmente, el trono de España fue otorgado a Felipe de Anjou, de la dinastía borbónica. Esto marcó el comienzo de la Monarquía Borbónica en España.
La muerte de Carlos II marcó el fin de una etapa en la historia de España. Durante su reinado, España llegó a ser una de las potencias más grandes de Europa. Aunque Carlos II dejo un legado de conflicto y problemas internos, también fue el último rey de la Dinastía de los Reyes Católicos en España.
En 1700, la monarquía española estaba en manos de Felipe V de Borbón. La llegada de Felipe al trono ocurrió tras un acontecimiento histórico conocido como la Guerra de Sucesión Española. Esta guerra tuvo lugar entre 1701 y 1714 como resultado de la disputa por el trono de España entre el Archiduque Carlos de Austria y Felipe V.
Felipe V de Borbón fue el primer rey de la casa de Borbón en España. Fue hijo del Rey Luis XIV de Francia, y asumió el título de rey de España en 1700. Durante su reinado, Felipe V transformó el sistema político español, otorgando la primacía al ejército y a los ministros de estado, que posteriormente se convertirían en consejeros del rey.
Durante su reinado, Felipe V enfrentó diversas dificultades, incluyendo la oposición de los principales estados españoles y el aumento del descontento popular. A pesar de ello, Felipe V logró mantener el control sobre España, imponiendo un estilo de gobierno absoluto. Tras un reinado de diez años, Felipe V fue sucedido en el trono por su hijo Fernando VI de Borbón.
El año 1700 fue un año de dramáticas consecuencias para la monarquía española. El rey Carlos II de España murió sin dejar un heredero, lo que provocó la Guerra de Sucesión Española. Esta guerra fue una lucha entre los candidatos de varios países europeos para suceder a Carlos II en el trono. El Archiduque Carlos de Austria, el Duque de Anjou (nieto de Luis XIV de Francia) y un posible candidato español, el Duque de Saboya, fueron los principales contendientes. Finalmente, el Tratado de Utrecht de 1713 reconoció al Archiduque Carlos como el rey Carlos III de España, lo que puso fin a la Guerra de Sucesión Española. El resultado fue una pérdida de territorio para España, que se vio obligada a ceder Gibraltar a Gran Bretaña, así como muchas colonias en América y el norte de Italia. La Guerra de Sucesión Española marcó el comienzo de la decadencia de España como potencia europea.