En el año 1890, el mundo experimentó una serie de cambios importantes. Estados Unidos se convirtió en la primera nación en tener un censo completo de la población en todo el país. Los datos recopilados mostraron que la población de Estados Unidos era de 62.947.714 personas. Además, el Congreso de Estados Unidos aprobó la Ley de Derechos Civiles de 1890, que garantizaba los derechos de los ciudadanos afroamericanos y los protegía de la discriminación racial.
En el ámbito internacional, el Reino de Italia fue formado tras una guerra de unificación contra Austria. La guerra duró un año y terminó con la ayuda de Francia. El Reino Unido también ayudó a Italia durante la guerra. El Tratado de Uccialli, firmado entre Italia y el Imperio Otomano, puso fin a los conflictos en el Mar Mediterráneo.
En la India, el Gobierno de la Compañía Británica de las Indias Orientales fue abolido y el país fue oficialmente bajo el control del Reino Unido. Esto significó que el Reino Unido se convirtió en el gobierno oficial de la India. La India perdió su independencia durante el periodo de la Compañía Británica de las Indias Orientales.
En el continente americano, Brasil se mudó de una monarquía a una república. El primer presidente de Brasil fue el Marechal Deodoro da Fonseca. El Brasil recibió una nueva Constitución en 1891, que también estableció un sistema presidencial.
En el ámbito de la ciencia, el año 1890 vio la invención de la máquina de escribir por parte de Christopher Latham Sholes. Esta fue una de las primeras invenciones en el ámbito de la computación y la informática. También fue el año en que el químico alemán Friedrich August Kekulé publicó su teoría del anillo bencénico, que explicaba la estructura de los compuestos orgánicos.
En 1890, el mundo experimentó una serie de cambios importantes en muchos ámbitos, desde la ciencia hasta la política. Estos cambios afectaron a muchas personas en todo el mundo y fueron la base para el desarrollo de la tecnología, la ciencia y la cultura modernas.
En 1890, Estados Unidos vivió uno de los periodos más importantes de su historia. Esto fue conocido como el período de la Fiebre del Oro, que fue una etapa de desarrollo económico, tecnológico y social. Durante este periodo, el país experimentó una gran cantidad de cambios en todas las áreas. Uno de los principales cambios fue el aumento de la inmigración, lo que llevó a una mayor diversidad y a una economía más desarrollada. Además, el desarrollo de la tecnología permitió que la producción industrial aumentara, lo que ayudó a impulsar la economía. El avance en la ciencia también permitió un mejor entendimiento de la naturaleza y la forma en que funcionan los sistemas de la Tierra.
En cuanto a la economía, el comercio entre Estados Unidos y el resto del mundo aumentó significativamente. Esto permitió que las empresas estadounidenses exportaran sus productos a todo el mundo. Esto ayudó a estabilizar la economía estadounidense y a generar empleos para la población. Al mismo tiempo, el país comenzó a experimentar una mayor industrialización, lo que permitió a millones de personas trabajar en fábricas y obtener un mejor salario. Finalmente, el gobierno de Estados Unidos implementó una serie de leyes para proteger el medio ambiente, mejorar la seguridad alimentaria y reducir la desigualdad entre ricos y pobres.
En conclusión, el año 1890 fue un momento importante en la historia de Estados Unidos. La Fiebre del Oro trajo consigo un aumento de la inmigración, el desarrollo de la tecnología, el comercio internacional, la industrialización y las reformas gubernamentales. Estos cambios fueron fundamentales para el desarrollo económico, tecnológico y social de Estados Unidos y ayudaron a moldear el país de hoy.
En 1890 España fue testigo de grandes cambios políticos y sociales. Durante este año, España experimentó una transformación significativa desde un modelo tradicional a uno más moderno. La abolición de la Monarquía y la proclamación de la Primera República Española en el mes de febrero marcaron el comienzo de una nueva era. El gobierno de la República Española fue dirigido por el Partido Republicano Federal, que se había formado en 1873 como un movimiento político para promover la modernización de España. El Partido Republicano Federal fue responsable de la aprobación de la Constitución Española de 1869, que estableció el marco para la separación de poderes en el gobierno. Además, la Constitución estableció la libertad de prensa, la libertad de expresión y el derecho a la educación. Estas reformas democráticas fueron consideradas como una gran victoria para los españoles.
Durante el mismo año, el gobierno republicano también se ocupó de modernizar la economía española. Esto se reflejó en el nacimiento de nuevas industrias, el desarrollo de infraestructuras y la modernización de los servicios públicos. Estas reformas contribuyeron a la creación de empleo y a una mejora general en la calidad de vida de los españoles. Asimismo, el gobierno de la República Española se dedicó a mejorar la situación de los obreros, a través de la creación de sindicatos y la promulgación de leyes laborales. Estas medidas contribuyeron a un aumento general en el nivel de vida de los trabajadores españoles.
En 1890 también se llevaron a cabo importantes reformas en el sector educativo. Esto incluyó la apertura de nuevas escuelas y universidades, así como la introducción de nuevos programas educativos para mejorar el acceso a la educación para los españoles. Estas reformas contribuyeron a un aumento general en el nivel de educación de los españoles. Además, el gobierno de la República Española impulsó la creación de museos, bibliotecas y centros culturales para promover el interés por el arte y la cultura. Estas reformas contribuyeron a una mejora general en la calidad de vida de los españoles y a una mayor participación en el desarrollo intelectual de España.
En 1890, España experimentó una profunda transformación política, social y económica. Estas reformas contribuyeron a una mejora en la calidad de vida de los españoles y al desarrollo intelectual del país. Esto demuestra la capacidad de los españoles para adaptarse a los cambios y mejorar sus condiciones de vida.
El 25 de octubre de 1889, el emperador brasileño Dom Pedro II fue derrocado, poniendo fin a la monarquía brasileña. El emperador había sido el último soberano europeo en el Nuevo Mundo, pues desde 1822, el Brasil había sido un estado independiente. El acontecimiento fue el resultado de una serie de reformas políticas que habían transformado el gobierno brasileño en un sistema representativo republicano. Estas reformas, propuestas por el naciente movimiento republicano, se habían iniciado en 1881 con la abolición de la esclavitud. Al mismo tiempo, se llevaron a cabo reformas sociales como el mejoramiento de las condiciones laborales, el desarrollo de la educación y la modernización de la infraestructura del país. Estas reformas fueron el resultado de una oposición al gobierno monárquico y de una lucha por la democracia.
Después del derrocamiento del emperador, el país fue gobernado por una regencia hasta 1891, cuando el Congreso proclamó la República Brasileña. La República de Brasil se estableció como una democracia representativa bajo una Constitución aprobada en 1891. El nuevo gobierno republicano fue liderado por el primer presidente de Brasil, Deodoro da Fonseca. El Gobierno de la República se caracterizó por la modernización de la infraestructura del país y la mejora de las condiciones de vida de los ciudadanos. Esto permitió que el país se desarrollara económicamente, logrando el reconocimiento internacional como una de las principales potencias regionales.
El 25 de octubre de 1889 marca un hito en la historia de Brasil y de América Latina como un todo. El derrocamiento de la monarquía brasileña y la creación de la República de Brasil, liderada por un nuevo gobierno democrático, abrió la puerta a un nuevo capítulo en la historia de la región. El acontecimiento también contribuyó a la lucha por la democracia en todo el mundo, consagrando el principio de que los pueblos tienen el derecho a elegir sus propios gobernantes.
En 1890, México fue testigo de varios acontecimientos importantes que marcaron la historia. Por un lado, el Presidente Porfirio Díaz se consolidó como el líder indiscutible del país luego de vencer a su rival Manuel González en las elecciones presidenciales. Esto marcó el principio del periodo conocido como el Porfiriato.
En julio de 1890, se firmó el Tratado de Amistad, Comercio y Navegación entre México y Japón, lo que permitió a ambos países establecer relaciones diplomáticas. Este acontecimiento se considera el primer tratado de su tipo entre un país asiático y uno americano.
En otro orden de cosas, en 1890 se dio inicio a la construcción de la línea ferroviaria México-Veracruz, la cual se considera como la primera línea de trenes de carga de México. Esta línea ferroviaria fue una de las primeras obras de ingeniería de México durante el Porfiriato.
En el mismo año, se llevó a cabo la Exposición Universal en París, Francia. Esto fue posible gracias a la ayuda financiera del gobierno mexicano, encabezado por Porfirio Díaz. La exposición fue un punto de inflexión para el renacimiento cultural mexicano, así como una oportunidad para que México mostrara su cultura y arte a todo el mundo.
En 1890, México también fue testigo de la fundación de la Universidad Nacional Autónoma de México, la cual fue fundada por el gobierno mexicano como parte del proyecto para modernizar el país. Esta universidad se ha convertido en uno de los centros educativos más importantes de México.
Finalmente, también en 1890 se publicó el primer número de la revista El Monitor Republicano, la cual fue una de las primeras publicaciones políticas de México. Esta revista tenía como objetivo difundir el pensamiento liberal en el país, y fue uno de los primeros medios de comunicación que se atrevió a cuestionar al gobierno de Porfirio Díaz.
En conjunto, los acontecimientos de 1890 marcaron un punto de inflexión para México, abriendo la puerta a un periodo de profundos cambios políticos, sociales y económicos.