El rey Jaime I de España era un monarca políglota que hablaba cinco lenguas diferentes. Estas lenguas eran el latín, el francés, el italiano, el portugués y el castellano. El castellano fue el idioma que más hablaba, pues es el que le enseñaron de niño.
Además, el rey Jaime I también tenía un conocimiento relativo del árabe, el hebreo y el catalán. Conocía los dos primeros idiomas gracias a la influencia del reino islámico y judío que existía en España en aquel entonces. El catalán fue un idioma que aprendió a lo largo de su vida.
El rey Jaime I fue el primer monarca de España que hablaba castellano como primer idioma. Esto fue importante porque legitimó el uso del castellano como lenguaje oficial en el país. Esto abrió la puerta para que el castellano se generalizara y se impusiera como el idioma oficial de España.
Gracias al esfuerzo del rey Jaime I, el castellano se hizo popular entre la nobleza y los ciudadanos de España. Esto ayudó a la unificación de España como un solo país y marcó el inicio de una gran era para el castellano. Hasta el día de hoy, el castellano sigue siendo el idioma oficial de España, gracias al legado del rey Jaime I.