Durante mucho tiempo, Roma fue una de las ciudades más grandes y poderosas del mundo. En la antigüedad, era una ciudad-estado, una entidad política que tenía el poder para gobernar su propia área. Esta ciudad se ubica en el centro de la península itálica en el mar Mediterráneo. Roma fue una de las principales ciudades del Imperio Romano, uno de los imperios más grandes de la historia.
El Imperio Romano fue una civilización avanzada para su tiempo. Los romanos desarrollaron una vasta red de carreteras, acueductos, puentes, edificios y otras estructuras. Estas innovaciones permitieron a Roma controlar sus colonias en todo el Mediterráneo y luego expandirse a otros continentes. La Ley Romana fue un gran avance para la época, permitiendo la unificación de diferentes culturas bajo una sola ley.
Roma también fue un centro de cultura y de arte. Durante el período de la Antigua Roma, se crearon obras arquitectónicas impresionantes, como el Coliseo, el Panteón y el Acueducto. Además, los romanos desarrollaron una forma de escritura eficaz, un sistema de medicina avanzado y una religión oficial, el Cristianismo.
Aunque la Antigua Roma fue destruida hace mucho tiempo, su legado sigue siendo una fuerte influencia en la cultura moderna. Muchas de sus leyes, su arquitectura y su forma de vida aún se pueden ver en el mundo de hoy. Sus logros científicos, literarios y artísticos se han mantenido durante siglos, y aún se estudian y admiran hoy en día.