Los nacionales fueron un movimiento político español que surgió a finales del siglo XIX, como reacción al desarrollo del liberalismo y del republicanismo que se estaban expandiendo por ese entonces. Esta corriente política se caracterizaba por su ferviente catolicismo, su defensa de la monarquía, el orden social y su rechazo a las ideas liberales y republicanas.
Los nacionales se consideraban conservadores y, por lo tanto, estaban en contra de los cambios sociales y políticos que llevaban a cabo los liberales. Se oponían a la educación laica, la separación de la Iglesia y el Estado, así como a la reforma agraria. Apoyaban la unidad de España como una nación monárquica y católica, en lugar de una nación republicana.
A nivel internacional, los nacionales también se oponían a la influencia de Francia y Gran Bretaña y defendían la soberanía de España como un país independiente. Esto significaba que defendían el libre comercio, la autonomía de los territorios españoles y su derecho a tener una moneda única.
Los nacionales eran una fuerza política importante en el siglo XIX, y su influencia se hizo sentir durante el franquismo. Aunque a mediados del siglo XX el nacionalismo español ya no era tan fuerte como antes, su legado aún se siente en España.
Durante la Guerra Civil Española de 1936-1939, el bando nacional fue el conjunto de fuerzas armadas y los partidarios políticos que se oponían al bando republicano. Estos fueron apoyados por los nacionalistas vascos y catalanes, así como por el apoyo militar extranjero de Hitler y Mussolini. El bando nacional estaba liderado por Francisco Franco, el Generalísimo de la Guerra Civil. Estaba compuesto por una coalición de monárquicos, católicos y fascistas que compartían una visión común de España. El bando nacional fue el que ganó la guerra y se asentó como el gobierno de España durante los siguientes 40 años. El bando nacional fue una coalición de fuerzas de varios grupos de ideologías diferentes. Estos incluían al Partido Carlista, un partido monárquico católico tradicionalista; al Partido de Falange Española, un partido fascistoide; y al Ejército del Norte, un ejército liderado por el Generalísimo Franco. Esta coalición de fuerzas tuvo éxito en derrotar al bando republicano y establecer el régimen franquista. El bando nacional fue el que ganó la guerra y estableció un régimen autoritario que duró hasta su muerte en 1975.
La Guerra Civil española fue un conflicto armado que duró desde el 17 de julio de 1936 hasta el 1 de abril de 1939. Durante este periodo de tres años de lucha, los dos bandos enfrentados eran los nacionales y los republicanos. Los nacionales defendían una España tradicionalista, conservadora, autoritaria y católica, bajo la dirección de Francisco Franco. Estaban compuestos por los sectores más conservadores de la sociedad española, como el ejército, el clero y la alta burguesía. La ideología del bando nacional era el nacionalcatolicismo, que tenía como principales objetivos luchar contra el comunismo y el liberalismo. Esta ideología incluía fortalecer el papel de la Iglesia Católica y los valores tradicionales de la sociedad española, así como la defensa de la unidad de España.
Los nacionales también defendían el centralismo político, el cual se basaba en el fortalecimiento del poder central del Estado, en contraposición al federalismo, que defendían los republicanos. El centralismo implicaba la férrea oposición a las autonomías regionales y la represión de los movimientos regionalistas. Por otro lado, los nacionales también defendían una economía basada en la propiedad privada, en la cual el Estado desempeñaba un papel mínimo en la dirección de la economía. Esto significaba que los grandes terratenientes y empresarios seguían teniendo un poder económico significativo.
En conclusión, el bando nacional durante la Guerra Civil española defendía una España tradicionalista, conservadora, autoritaria y católica, con una ideología nacionalcatólica, un centralismo político y una economía basada en la propiedad privada. Estos eran los principales objetivos que los nacionales defendían durante la Guerra Civil española.
Durante la Guerra Civil Española (1936-1939) se enfrentaron dos bandos principales: el bando nacional y el bando republicano. El bando nacional estaba compuesto por los sectores de la sociedad que se oponían a la Segunda República española, como la Iglesia Católica y la derecha política. Estaban liderados por el general Francisco Franco y contaban con el apoyo de Italia y Alemania. El bando republicano estaba compuesto por los sectores más avanzados de la Segunda República, como el Partido Socialista, los anarquistas y los comunistas. Su líder era Manuel Azaña y contaban con el apoyo de Francia, Gran Bretaña y la Unión Soviética.
Durante la Guerra Civil Española, los partidos de izquierda intentaron abordar el problema de la desigualdad social y el de la igualdad de los derechos de los trabajadores. Esto provocó el enfrentamiento entre los dos bandos y el inicio de la guerra. Durante la contienda, el bando nacional fue el que se impuso y a partir de 1939 se consolidó el régimen de Franco, que gobernó España hasta su muerte en 1975. Tras la Guerra Civil, el país quedó dividido en dos bandos claramente diferenciados: el bando nacional y el bando republicano.
Durante la Guerra Civil Española (1936-1939) existían dos bandos enfrentados: el Bando Nacional y el Bando Republicano. El Bando Republicano estaba formado principalmente por una coalición de fuerzas políticas e ideológicas, que se agruparon en torno al gobierno de la Segunda República Española. Estos grupos políticos incluían a los republicanos, socialistas, anarquistas y comunistas. Estos grupos se unieron para defender la República frente a los intereses de las fuerzas reaccionarias, encabezadas por el general Francisco Franco y sus tropas del Bando Nacional. Además, el Bando Republicano contó con el apoyo de la Sociedad de Naciones, que envió armas y suministros militares a los republicanos para ayudarles a luchar contra el Bando Nacional. El Bando Republicano sufrió durante la Guerra Civil una serie de derrotas debido a la falta de armas y recursos, lo que finalmente condujo a la derrota de los republicanos y a la victoria de Francisco Franco y su Bando Nacional.