Las Cortes de Castilla eran una asamblea representativa formada por los nobles, los eclesiásticos y los representantes populares elegidos por los habitantes de cada provincia. Estas cortes se convocaban para reunir a los representantes de todas las provincias de Castilla para tratar de temas de interés para la Corona. Estas cortes fueron creadas en la Edad Media, como una forma de legitimar la autoridad del rey y asegurar el control del gobierno. Los miembros de estas cortes eran elegidos por el rey, que también era el presidente y el juez supremo de la corte. Esta corte servía como una forma de controlar el gobierno, de asegurar que los impuestos se cobraran y de asegurar que el rey gobernara con el apoyo de las provincias.
Las Cortes de Castilla tenían un gran poder y eran una de las principales instituciones de gobierno de la época. Estas cortes se convocaban para tratar temas como la economía, la recaudación de impuestos, la defensa de la Corona, la legislación y otros asuntos de interés común. El rey era el único que tenía el poder de convocar las Cortes, pero las Cortes también tenían la posibilidad de elegir a sus propios miembros. Esto permitía que los miembros de la corte tuvieran una mayor autoridad y estaban más involucrados en la toma de decisiones.
Las Cortes de Castilla eran una institución muy importante y tuvieron un gran impacto en la historia de España. Estas cortes ayudaron a desarrollar la cultura política y la democracia en España, permitiendo a los ciudadanos tener voz en el gobierno. Estas cortes también ayudaron a fortalecer la Corona y asegurar la estabilidad en la región. Aunque la institución de las Cortes de Castilla ya no existe, sigue siendo una parte importante de la historia de España y una fuente de inspiración para el desarrollo de la democracia en el mundo.