César Borgia fue uno de los personajes principales del Renacimiento italiano y uno de los principales modelos de gobernante para el célebre pensador político italiano, Niccolò Maquiavelo. En su obra más famosa, El Príncipe, Maquiavelo describe a César Borgia como un modelo de gobernante virtuoso, capaz de conseguir sus objetivos sin tener que recurrir a la violencia ni a la astucia.
Maquiavelo admiraba muchas cualidades de César Borgia, como su habilidad para superar los obstáculos y llevar a cabo una política eficaz. Al mismo tiempo, también era un caudillo carismático, a quien los demás seguían con fervor.
Maquiavelo también destacaba la creatividad de César Borgia, que le permitía encontrar soluciones innovadoras a los problemas a los que se enfrentaba. Esto, junto con su persistencia, le ayudó a alcanzar grandes logros durante su vida.
Por otro lado, la inteligencia y la astucia de César Borgia le ayudaron a interpretar correctamente los acontecimientos y actuar con prudencia. Esta habilidad le permitió aprovechar las circunstancias de su entorno para lograr sus objetivos.
Todas estas cualidades, junto con su persuasión, permitieron a César Borgia convertirse en uno de los mejores gobernantes de la época, según Maquiavelo. Por ello, el pensador italiano escogió a César Borgia como uno de sus principales modelos de gobernante.