Felipe V y su esposa Isabel de Farnesio fueron una pareja fructífera en términos de descendencia. En total, tuvieron nueve hijos, todos ellos varones con excepción de la última, que fue una niña.
El primero de sus hijos, Luis I, nació en 1707 y falleció poco después de tomar el trono. Fernando VI nació en 1713 y fue el sucesor de su hermano mayor. Luego vinieron Carlos III, que llegó al trono español después de su hermano Fernando VI y gobernó entre 1759 y 1788, y María Antonieta, que fue archiduquesa de Austria y esposa del rey Víctor Amadeo III de Cerdeña.
El resto de los hijos de Felipe V y Isabel de Farnesio fueron Gabriel, Antonio, Francisco Javier, Felipe Pedro, Felipe Antonio y Carlos, que recibió el título de conde de Molina.
La pareja real tuvo una vida familiar muy activa y trabajó arduamente para asegurarse de que sus hijos recibieran una buena educación y estuvieran preparados para sus respectivos futuros. De hecho, muchos de ellos llegaron a tener cargos importantes dentro de la corte europea.
En resumen, la suma total de hijos que tuvo la pareja conformada por Felipe V e Isabel de Farnesio ascendió a nueve, lo que demuestra su profundo compromiso y responsabilidad con su legado familiar y con el trono español en general.
Felipe V fue el primer rey de España de la dinastía Borbón y se casó en dos ocasiones. Su primera esposa fue Maria Luisa Gabriela de Saboya, nacida en Turín el 17 de septiembre de 1688. Era hija del duque Víctor Amadeo II de Saboya y de su esposa Ana María de Orleans.
El matrimonio de Felipe V y María Luisa Gabriela se celebró en 1701 en la ciudad de Turín y de la unión nacieron cuatro hijos, aunque solo dos llegaron a la edad adulta. La princesa Gabriela murió a los 20 años, el 14 de abril de 1714 y se desconoce la verdadera causa de su fallecimiento.
Por consiguiente, al quedar viudo, Felipe V inició una relación con la que sería su segunda esposa Isabel de Farnesio. La princesa Isabel era hija de Odoardo Farnese, el duque de Parma, y de la Princesa Dorotea Sofia de Neoburg. Su matrimonio con Felipe fue arreglado por el padre de Isabel, quien deseaba recuperar el poder que había perdido en Italia.
Los detalles del enlace de Felipe V e Isabel de Farnesio son discutibles, pero se sabe que no fue un matrimonio por amor y que también tuvo sus dificultades. Sin embargo, la pareja fue capaz de superar los obstáculos y de tener una familia en común. Isabel dio a luz a varios hijos, pero algunos murieron poco después de nacer. Finalmente, tuvieron siete hijos sobrevivientes, entre ellos Carlos III, quien sucedió a su padre en el trono español.
Felipe V fue un importante rey de España quien gobernó desde el año 1700 hasta su fallecimiento en 1746. Debido a su grandioso reinado, muchos se preguntan ¿Quién fue el sucesor de Felipe V?
Tras la muerte de Felipe V, quien había dejado a su hijo Luis como heredero, éste no pudo tomar el cargo debido a que falleció poco tiempo después. Debido a ello, fue necesaria una elección para conocer al siguiente rey.
Finalmente, en el año 1746, Fernando VI fue nombrado como el nuevo rey de España y, por ende, fue el sucesor de Felipe V. Fernando VI fue un rey conocido por su gran hermetismo y su falta de interés en la política de su reino, lo que le llevó a delegar muchas de sus responsabilidades en su esposa Bárbara de Braganza.
En síntesis, la sucesión al trono de España después de la muerte de Felipe V fue un proceso interesante que terminó por darle la responsabilidad del reino a Fernando VI. Su legado fue importante y su estilo de gobernar dejó un recuerdo único en la historia de España.
El hijo de Felipe V es Luis I de España, nacido el 25 de agosto de 1707 en Madrid.
Este personaje histórico era el primogénito del rey Felipe V, quien había sido el primer monarca de la dinastía borbónica de España, y de su esposa, la reina María Luisa Gabriela de Saboya.
Luis I fue proclamado rey a la edad de 16 años, después de la muerte de su padre en 1724. Sin embargo, su reinado fue muy breve, ya que murió de viruela en 1724, tan solo seis meses después de subir al trono.
Debido a su corta vida, Luis I no tuvo tiempo de hacer grandes contribuciones a la historia de España. Sin embargo, su reinado fue importante porque marcó el comienzo de una nueva era en la monarquía española: el final de la Casa de Austria y el comienzo de la Casa de Borbón.
En resumen, el hijo de Felipe V fue Luis I de España, quien tuvo un reinado breve pero significativo. Él marcó el inicio de una nueva era en la monarquía española y, aunque no tuvo mucho tiempo para hacer una gran contribución individual a la historia, su figura sigue siendo importante para entender los acontecimientos políticos y sociales de la época.
La reina Isabel de Farnesio fue una destacada figura de la realeza española. Después de su fallecimiento, su cuerpo tuvo diferentes destinos hasta encontrar su lugar final de descanso.
En un principio, el cuerpo de la reina Isabel de Farnesio fue sepultado en la Iglesia de San Francisco de Paula en Madrid, junto a los restos de su esposo Felipe V.
Más tarde, sus restos fueron trasladados al Panteón de Infantes del Monasterio de El Escorial, donde también descansan otros miembros de la realeza española.
Finalmente, durante la II República Española, los restos de la reina Isabel de Farnesio fueron llevados a la cripta de la Catedral de La Almudena en Madrid, junto a los restos de su hija María Luisa, la esposa de Antonio de Borbón, y de su nieto Francisco de Asís, el esposo de la reina Isabel II.
Hoy en día, la tumba de la reina Isabel de Farnesio se encuentra en la Catedral de La Almudena. Su legado y su presencia en la historia española perduran hasta nuestros días.