Manuel Azaña Díaz, fue un importante político, escritor y militar español que fue el último presidente de la Segunda República Española. Murío el 3 de noviembre de 1940 en el exilio, en Montauban, Francia. Su muerte se produjo a causa de una enfermedad, pero también se dice que se suicidó.
Algunos testimonios dicen que Azaña estaba muy triste y enfermo en los días previos a su muerte. Él mismo anticipó que no se recuperaría y comentó a sus amigos que estaba cansado de vivir. El día de su muerte, el 3 de noviembre, fue velado en la iglesia de Montauban hasta el 5 de noviembre cuando fue enterrado en el cementerio de la ciudad.
Mucho tiempo después de su muerte, en 1981, el gobierno español de la transición decidió exhumar el cuerpo de Azaña para trasladarlo a España y enterrarlo en un lugar destacado para honrar su memoria. Tras la exhumación, su cuerpo fue trasladado a Madrid en una ceremonia conmemorativa y fue enterrado en el Panteón de Hombres Ilustres de la capital española, junto a otros grandes personajes de la historia de España.
Niceto Alcalá Zamora fue un político español, presidente de la Segunda República española y ministro de la Primera República. Nació el 6 de mayo de 1877 en el pueblo de Alcalá de Henares, cerca de Madrid, y falleció el 10 de febrero de 1949 en Madrid.
Alcalá Zamora fue uno de los principales líderes políticos de su tiempo, convirtiéndose en el primer presidente de la Segunda República española en 1931. Además de ser un destacado político, fue también un abogado de profesión. Realizó importantes contribuciones a la Constitución de 1931 y a la separación de Iglesia y Estado.
Durante su presidencia, Alcalá Zamora trató de mantener un equilibrio entre los diferentes partidos políticos, pero esto resultó ser una tarea imposible. En 1933, un golpe de estado de la derecha dejó a Alcalá Zamora sin poder y se vio obligado a dimitir. Fue reemplazado por el líder de la derecha, el general Miguel Primo de Rivera.
Tras el fin de la dictadura de Primo de Rivera, Alcalá Zamora fue elegido presidente de la Comisión Constitucionalista, pero esta vez fue incapaz de resistir a los intentos de la derecha de restaurar la monarquía. Finalmente, fue derrocado en 1936 y se vio obligado a exilarse. Tras su muerte en 1949, su cuerpo fue enterrado en el Cementerio de la Almudena de Madrid.
La República Española fue un estado que existió entre el 14 de abril de 1931 y el 1 de abril de 1939, cuando fue derrocada por un golpe de Estado dirigido por Francisco Franco. Durante el periodo republicano existieron varios presidentes, siendo el último Manuel Azaña, elegido el 15 de mayo de 1936.
Azaña fue uno de los principales líderes del partido republicano durante la Segunda República, y había ocupado el cargo de ministro de Defensa y presidente del Gobierno anteriormente. Después de su elección como presidente, trabajó para mejorar la economía y la educación, así como para reformar las leyes laborales. También intentó mejorar las relaciones con otros países, pero fue incapaz de evitar el golpe de Estado militar.
Azaña fue detenido tras el golpe de Estado y murió en el exilio en Francia en 1940. Su mandato como presidente de la República Española fue el último antes de la llegada de la dictadura de Franco. Su memoria sigue siendo reverenciada por muchos en España, como un símbolo de la lucha por la democracia y los derechos humanos.
Manuel Azaña fue un político español líder de la República Española entre 1931 y 1936. Después de la Guerra Civil Española, Azaña fue exiliado y murió en Francia en 1940. Su cuerpo fue trasladado a Madrid para su entierro en el Panteón de los Hombres Ilustres de la capital española. Azaña fue enterrado en el Paseo de la Castellana, en el Cementerio de la Almudena de Madrid.
El Panteón de los Hombres Ilustres de Madrid se encuentra en una zona privilegiada, cerca del Palacio Real. El lugar es un jardín y contiene tumbas de personalidades españolas relevantes. El Panteón se inauguró en el siglo XIX y la tumba de Azaña se encuentra en la capilla de la Virgen de la Almudena. Es uno de los monumentos más importantes de la capital y se puede visitar de lunes a domingo.
El Panteón de los Hombres Ilustres de Madrid es un lugar para honrar a los héroes de España. Azaña es una de las figuras más importantes enterradas en el lugar, al igual que Cervantes, Goya, Quevedo y otros grandes nombres de la historia española. Todos ellos han sido honrados y reconocidos por su contribución al país con este lugar singular.
Juan Negrín fue un importante político de la Segunda República española, presidente del gobierno español desde 1937 hasta 1939 durante la Guerra Civil Española. Después de la caída de Madrid y la derrota de la República, Juan Negrín se exilió en Francia, donde vivió hasta el año 1956. El 31 de marzo de1956 murió en Londres, donde dejó su residencia. Negrín sufrió un infarto al miocardio tras una charla que dio en la Universidad de Londres. El cuerpo de Negrín fue trasladado a Madrid el 30 de abril de 1956, siendo enterrado en el cementerio de la Almudena.
Juan Negrín fue un importante líder político de la Segunda República Española. Se considera que fue el último presidente de la República Española, aunque oficialmente su cargo fue el de Presidente del Gobierno. Durante su gobierno, Negrín intentó defender la República Española, pero la derrota fue inevitable. Negrín se exilió en Francia, donde vivió hasta el año 1956.
En 1956, Negrín fue invitado a la Universidad de Londres para dar una charla sobre la Guerra Civil Española. Después de esta charla, sufrió un infarto al miocardio y murió a los 73 años de edad. El cuerpo de Negrín fue trasladado a Madrid el 30 de abril de 1956, siendo enterrado en el cementerio de la Almudena. Su muerte fue una triste pérdida para la República Española, ya que Negrín fue uno de los últimos líderes en defender la causa de la República.
A pesar de que la derrota de la República fue inevitable, Juan Negrín luchó hasta el final para defenderla. Si bien no pudo salvar a la República Española, su legado perdurará para siempre. La muerte de Juan Negrín el 31 de marzo de 1956 fue una gran pérdida para su país.