El ducado de Saboya es una antigua región de los Alpes italianos que se extiende desde el río Po hasta el lago de Ginebra. Esta región era conocida por sus monarcas y su gobierno, que gobernaban desde el año 1140 hasta 1860. Durante este período, el ducado de Saboya fue una de las principales potencias de Europa y su gobierno estuvo asociado con el nacimiento de la modernización de Italia. El ducado de Saboya fue también el lugar de nacimiento de la dinastía de los Saboya, que gobernó el país durante muchos siglos.
En 1860, el ducado de Saboya fue anexado por el Reino de Italia, con lo que se convirtió en una de las regiones de Italia. La región se dividió en dos provincias: la provincia de Cuneo, que se extiende hasta el lago de Ginebra, y la provincia de Turín, que se extiende hasta el río Po. Desde entonces, el ducado de Saboya ha sido gobernado por el gobierno italiano.
Hoy en día, el ducado de Saboya se encuentra en el noreste de Italia, en las provincias de Cuneo y Turín, con la ciudad de Turín como su capital. Esta región ha sido un importante destino turístico durante muchos años, gracias a su hermosa naturaleza y sus numerosas atracciones, como los parques nacionales, los castillos y los museos. El ducado de Saboya es un lugar ideal para los amantes de la historia, el arte y la cultura.
En el año 1861, la familia Savoia de Piemonte, Italia fue coronada como la primera dinastía de la Casa de Saboya y los miembros fueron nombrados como reyes de Italia. Esta línea real gobernó Italia hasta el año 1946, cuando el país se convirtió en una república. La familia real Savoia fue exiliada a Portugal y algunos miembros de la familia se mudaron a la Argentina. Esta familia fue muy importante para la historia de Italia, pues habían contribuido a formar el reino y a unificar la nación. Sin embargo, su presencia en Italia fue vista por algunos como un símbolo de una época en la que el país estaba atrasado y oprimido por la monarquía.
Después de que la república italiana fue establecida en el año 1946, la familia real Savoia fue despojada de todos sus títulos y prerrogativas, y los miembros fueron despojados de su ciudadanía italiana. Esto significaba que no podían volver a Italia sin el permiso del gobierno. Esta situación cambió en el año 2002, cuando el ex-rei Umberto II volvió a Italia. Aunque fue recibido con entusiasmo por muchos italianos, otros consideraron que su regreso era una afrenta a la república.
En el año 2002, el parlamento italiano aprobó una ley que devolvía la ciudadanía italiana a la familia Savoia. Esta ley también restableció la propiedad privada de los miembros de la familia y les permitió regresar a Italia. Aunque la familia aún no ha sido restaurada a su antiguo estatus de monarca, los miembros pueden regresar a Italia y mantener su propiedad privada. Actualmente, la familia Savoia vive entre Italia, Suiza y Portugal, y algunos de sus miembros son muy respetados en Italia como líderes de la comunidad.
La familia Savoia ha pasado por un largo camino desde su exilio forzado en 1946. Aunque los miembros de la familia no han recuperado su antiguo estatus de realeza, han podido regresar a Italia y mantener su propiedad privada. La familia sigue siendo una parte importante de la historia de Italia y los miembros son respetados como líderes de la comunidad.
El duque de Saboya fue una figura histórica importante en el siglo XIV. Se trataba de un título nobiliario que pertenecía a la Casa de Savoy, una familia de la nobleza italiana. El primer duque de Saboya fue Amadeo de Saboya, quien fue coronado en 1323. Amadeo fue uno de los percursores del Reino de Italia, una entidad política cuya existencia se extendió desde 1861 hasta 1946. Durante su gobierno, el duque de Saboya expandió los límites de su territorio y logró una unificación política en la región. Tras su muerte en 1329, el título pasó a su hijo, Amedeo VI, quien también fue conocido como "el sabio" por su sabiduría y su inteligencia. Durante su reinado, Amedeo VI logró el aumento de la influencia de la Casa de Savoy, la cual se convirtió en una de las familias más influyentes de Italia. El último duque de Saboya fue Eugenio de Saboya, quien fue coronado en 1890. Fue el encargado de unificar el Reino de Italia y convertirlo en una nación moderna. Eugenio también fue el primero en utilizar el nombre de Italia para referirse al territorio. El duque de Saboya fue una figura histórica clave en la conformación e independencia de Italia.