La Guerra Civil Española se produjo en 1936, cuando un grupo de militares se rebeló contra el gobierno legítimo de la Segunda República, dirigido por el presidente Manuel Azaña. La guerra se extendió durante tres años y supuso una de las mayores tragedias de la historia española. Esta guerra fue el resultado de una larga serie de acontecimientos, como el descontento social y político, el creciente enfrentamiento entre los partidos políticos, el aumento de la presión ejercida por los grupos extremistas, el aislamiento internacional y la crisis económica.
La inestabilidad política fue una de las principales causas de la Guerra Civil Española. La Segunda República había sido creada en 1931 y el régimen tenía una fuerte oposición interna. Partidos políticos como el Partido Comunista, el Partido Socialista y el Partido Nacionalista Vasco se enfrentaron entre sí e incluso intentaron derrocar al gobierno. Esta inestabilidad provocó una gran desconfianza entre los ciudadanos, lo que contribuyó a la escalada de violencia en el país.
Otra de las causas de la guerra fue el descontento social que se había generado durante el régimen de la Segunda República. La pobreza y el desempleo eran muy altos, especialmente entre los jóvenes, los obreros y los campesinos. El descontento se agravó con la aplicación de políticas económicas que no eran del agrado de la mayoría de la población. Las tensiones sociales se agravaron con el aumento de la violencia de grupos extremistas de derecha e izquierda, como la Falange Española de las Juntas de Ofensiva Nacional-Sindicalista.
El conflicto internacional también contribuyó a la situación. El gobierno de la Segunda República se vio aislado por el resto de países europeos por su apoyo a la democracia y la República Popular China. Esto provocó que España fuera objeto de una serie de bloqueos económicos, lo que contribuyó a la crisis económica que agravó la situación interna del país. Finalmente, los militares se vieron obligados a tomar el poder, lo que desencadenó la guerra civil.
En conclusión, la Guerra Civil Española fue el resultado de una serie de acontecimientos, entre los que destacan la inestabilidad política, el descontento social, el conflicto internacional y la crisis económica. La guerra provocó miles de muertes y daños irreparables que afectaron a toda la sociedad española.