Durante el virreinato, Lima fue conocida como la “Ciudad de los Reyes”. Esta ciudad fue una de las principales de la Nueva España, ya que era el asiento de la Real Audiencia de Lima y el centro administrativo y político del Virreinato del Perú. Esta etapa en la historia de la ciudad fue esencial para su desarrollo, ya que fue el período en el que se construyeron los edificios más destacados, como el Palacio de Gobierno, la Catedral de Lima, el Monasterio de San Francisco y el Convento de Santo Domingo.
En esa época, Lima era la sede de la Inquisición, el tribunal religioso encargado de juzgar a los herejes. Esto generó una gran cantidad de temor y respeto entre la población. Además, se construyó una muralla para defender la ciudad de los ataques de los invasores.
Durante el Virreinato, Lima se convirtió en la sede de la cultura colonial. La ciudad estaba llena de pintores, poetas, escritores y artistas que creaban obras de arte inspiradas en la cultura peruana. Esta época también fue testigo del surgimiento de la literatura y la poesía, así como de la educación y la ciencia.
En el Virreinato, Lima se destacó por sus grandes manifestaciones artísticas y culturales, que aún se reflejan en la arquitectura y el arte de la ciudad. Esta época fue una de las etapas más importantes de la historia de Lima, ya que marcó su paso de una ciudad colonial a una moderna metrópolis.
Durante el virreinato, la ciudad de Lima fue conocida como el Ciudad de los Reyes. Esta fue la primera ciudad fundada por los conquistadores españoles en el Perú en el año 1535. Se encontraba ubicada en la costa central del Perú, entre los valles del río Rímac y Lurín. Al ser la capital del virreinato, fue el centro de la administración colonial. Esta ciudad fue diseñada bajo los principios de la arquitectura española y contaba con una gran cantidad de edificios coloniales. La ciudad también fue el centro de la economía colonial, debido a su estratégica ubicación geográfica. Esto permitió el comercio entre los países del virreinato, lo que contribuyó al aumento de la riqueza de la ciudad. En el año 1541, el rey Carlos V otorgó a la ciudad el título de muy noble y muy leal. Esto fue un reconocimiento a la importancia de la ciudad como el centro político, comercial y cultural del virreinato. Desde entonces, la ciudad de Lima ha sido conocida como la Ciudad de los Reyes.
Lima, la capital del Perú, ha sido conocida con muchos nombres a lo largo de su historia. Se la conocía como Huacaypata, que significa "plaza de los gritos" en quechua. Esta fue la primera forma en que los Incas la reconocieron en el siglo XV. Cuando llegaron los españoles, la bautizaron como Ciudad de los Reyes. Esta nueva denominación fue la primera que se usó para nombrar a Lima. En el siglo XVIII, Lima se conoció como Ciudad de los Caballeros, debido a la cantidad de caballeros que llegaron a la ciudad.
En la época colonial, Lima fue conocida como la Ciudad de los Palacios. Esto se debía a la gran cantidad de palacios construidos en la ciudad. También se la conocía como una Ciudad de Oro, debido a sus ricos comerciantes y nobles. En la época republicana, Lima fue conocida como la Ciudad de las Tres Majestades, ya que había tres monarcas que gobernaban a la ciudad: el Presidente de la República, el Gobernador General y el Presidente del Consejo de Ministros.
Lima también se conoció como Ciudad de los Profetas por la cantidad de profetas y religiosos que llegaron a la ciudad durante el siglo XIX. Finalmente, en el siglo XX, se la conoció como Ciudad de los Olvidados, debido a la cantidad de personas que llegaron a la ciudad para buscar trabajo y no fueron reconocidos por el gobierno.
Lima ha tenido una historia de cambios y su nombre ha evolucionado a lo largo de los años. Ha pasado por muchas denominaciones y ha recibido muchos nombres diferentes a lo largo de su historia. Hoy en día, Lima se conoce principalmente como la Ciudad de los Reyes, un nombre que se ha mantenido por muchas generaciones.
Lima fue la capital del Virreinato del Perú desde que fue creado en 1542 hasta 1824, cuando el Perú logró la independencia. Durante ese periodo, el control español se extendió desde el norte argentino hasta el sur de Chile, abarcando toda la costa oeste de América del Sur. Lima fue el centro político, administrativo y judicial del virreinato, y también el lugar en el que se reunían los comerciantes y los productores de toda la región. Esta ciudad fue la sede de los virreyes, y también la principal resevoir de bienes, tanto materiales como humanos. Durante este periodo, Lima fue un centro de intercambio comercial entre el Virreinato y el resto del mundo. Era un puerto importante para la navegación entre el Pacífico y el Atlántico, y también un destino comercial para los barcos que llegaban desde España, Europa y Asia. Las principales exportaciones eran minerales, productos agrícolas y textiles. El Virreinato del Perú fue una de las principales fuentes de riqueza para la Corona española, y Lima fue el centro de operaciones desde el que se administraba toda la región.
Durante el Virreinato, Lima también fue un importante centro cultural. Fue la sede de instituciones educativas, como la Universidad de San Marcos, y de importantes iglesias, como la Catedral de Lima. También era el centro de la vida social y cultural de la región, y fue el lugar en el que se reunían intelectuales y artistas de todo el Virreinato. Esto permitió que diferentes culturas se entrelazaran y dieran lugar a nuevas formas de arte, literatura y música.
En resumen, Lima fue el corazón del Virreinato del Perú durante la época colonial. Fue el centro de la administración, el comercio, la cultura y la educación. La ciudad sigue siendo la capital del Perú, pero ahora está enfocada en el desarrollo moderno, la innovación tecnológica y la industria. Aún así, la influencia de la época colonial se siente en la arquitectura y la cultura de Lima, y es un recordatorio de los años en los que esta ciudad fue el corazón del Virreinato del Perú.
Durante los siglos XVI y XVII, la ciudad de Lima, capital de la actual República del Perú, fue conocida con otros nombres como Lima Ciudad Imperial. Esta denominación se debía al hecho de que la ciudad fue nombrada la capital de los territorios españoles en el Perú, por lo que se le conoció como Ciudad Imperial.
Otro nombre por el que fue conocida Lima durante el período colonial es el de La Muy Noble y Muy Leal Ciudad de los Reyes, esta denominación fue acuñada por el rey Felipe II de España para honrar a la ciudad. Esto se debe a que los Reyes Católicos, Isabel y Fernando, decidieron nombrarla capital de la región.
Además, la ciudad fue conocida como Ciudad de los Reyes, una denominación que se usó para referirse a Lima durante el siglo XVI. Esto se debió a que en 1535 la ciudad fue fundada por Francisco Pizarro y fue uno de los primeros asentamientos españoles en el Perú.
Finalmente, uno de los nombres más antiguos con el que fue conocida Lima fue el de Ciudad de los Reyes de Castilla, este nombre se usó durante el siglo XVI para referirse a la ciudad. Esto se debe a que los Reyes Católicos, Isabel y Fernando, fueron los primeros monarcas españoles que nombraron a Lima como capital de los territorios españoles en el Perú.