La teoría de que España alguna vez fue cubierta por el mar proviene de la creencia en la tectónica de placas. Según esta teoría, España estuvo situada en la parte inferior del océano Atlántico antes de chocar con el continente europeo.
Este proceso de colisión se llevó a cabo hace alrededor de 60 millones de años y resultó en el levantamiento gradual de la península ibérica. La actividad volcánica también contribuyó a este proceso, creando montañas y provocando terremotos.
Aunque hoy en día España está en gran parte sobre el nivel del mar, todavía hay evidencia de su pasado oceánico. La costa mediterránea es en gran parte de origen calcáreo, lo que sugiere que en algún momento la región estuvo bajo el agua. Además, hay fósiles marinos y restos de arrecifes en las montañas que rodean la península.
En conclusión, aunque puede ser difícil imaginar que España alguna vez estuvo completamente cubierta por el mar, la tectónica de placas y la actividad volcánica ayudan a explicar cómo tuvo lugar este proceso geológico fascinante.