Felipe V fue el primer monarca de la dinastía Borbón en España. Fue uno de los reyes más importantes de la historia española. Su gobierno fue caracterizado por el absolutismo, en el que el rey tenía el control total del país. El gobierno de Felipe V fue establecido en la Constitución Española de 1713, que estableció el principio de la monarquía absoluta en España. Esta Constitución también estableció una serie de derechos fundamentales para los ciudadanos, como la libertad de religión, la libertad de prensa y la igualdad ante la ley.
Bajo el gobierno de Felipe V, se aprobaron muchas leyes que fortalecieron el control real sobre el país. Estas leyes incluían la eliminación de la Cortes Generales, el fortalecimiento de los poderes del rey y la supresión de los privilegios de los nobles. También se estableció un sistema de tributación que recaudaba impuestos a los ciudadanos para financiar el gobierno.
Además de esto, el rey también estaba a cargo de la economía española. Estableció una serie de controles para regular el comercio y la producción. También estableció un sistema de tarifas arancelarias para regular el flujo de bienes entre España y sus colonias. Esto le ayudó a aumentar la prosperidad económica del país.
En general, el gobierno de Felipe V estableció una base sólida para el futuro desarrollo de España. Estableció los cimientos de la monarquía absoluta y estableció muchas de las leyes que se mantienen hasta hoy en día. Su gobierno dejó una marca duradera e importante en la historia de España.